Por aquí una vez más. Han pasado varias cosas, entre ellas que estoy en otro grupo de estudio. La otra semana me toca dar clase toda la semana y este fin de semana me toca alistar todo el material para la próxima semana.
Ayer fue un día complicado, estuvimos muy presionados porque teníamos examen de física y también pruebas físicas. De ciencias teníamos una exposición, pudimos salir triunfantes con eso. Em física, la profesora no hizo el examen pero sí los ejercicios físicos y salimos super cansados de eso. Las compañeras decían que me iba a ir bien porque monto cicla, pero el esfuerzo físico que hago es demasiado, de por sí lo que hago es desgastarme porque no solo es hacer el ejercicio, también hay que alimentarse bien, y esa parte no está siendo bien suministrada por las difíciles condiciones económicas que por estos días nos acarrean. Solo depende de uno mismo salir de la misma pobreza, y es que ya me cansé de vivir así, y sentir la satisfacción de vivir en comodidad y bienestar es mi objetivo.
En la Práctica Pedagógica pude observar que los niños no tienen respeto por sus compañeros. Hay un grupo que es indisciplinado. Hay niños que se distraen fácilmente y no prestan atención a lo que la profesora está explicando. La mayoría de los niños, tienen padres con buena solvencia económica. Hay niños que tienen habilidades para el deporte, a otros les gusta el baile. Escuchan reggaetón, pero este género no es apropiado para niños de primaria que se están formando, esa música tiene contenido pesado, sexual, vulgar e inmoral, y denigrante. Qué tiene que estar haciendo un niño escuchando esa música, los adultos deben entender que ellos son niños, no son adultos. Para ellos hay música de niños, echa y pensada en ellos. “ La psicóloga de UNICEF Francisca Morales afirma que “así como nos preocupamos de la salud y la educación de los hijos, debemos ocuparnos del derecho a la recreación: la música les entrega a los niños identidad cultural.” (Rovati, 2018) Se sabe que un niño...
Hola hace mucho no escribía. Aveces pasan cosas que lo ponen a una en un mal estado de ánimo. Mi niñez no fue tan bonita como lo espera un niño (a), como realmente lo merecen, lleno de felicidad, crecí al lado de gente que no me trataba bien, y corriendo ciertos peligros con mi integridad física y emocional. Siempre estuve sola, excepto de los pocos amigos que hice, de los libros que leí y de los momentos que disfrute estando sola porque así mejor me sentía. Hace no mucho tiempo cuando presentía el mal andando por ahí cerca a los niños, me atreví a hablar, también porque se dio la oportunidad, pero no sirvió de nada, me trataron de resentida , (como si en verdad lo fuera). Y me molestó mucho, porque quedé mal, como la chismosa del barrio, cosa que no soy y detesto. No les comenté porque me importaran ellos, sino sus hijos, pero aún así no les importó. Pero me digo a mí misma de qué me preocupo yo, ¿yo, preocupándome por ellos? ¿cuándo ellos nunca se preocuparon por mi? es como tonto ...